Terapia de Reiki
Es la Energía Vital Universal canalizada y transmitida a través de la imposición de las manos del Terapeuta. En una sesión de Reiki, la energía es percibida instantáneamente en forma de calor, de frío, de cosquilleo, por nombrar las sensaciones más comunes. Ella va dirigida directamente a los puntos donde la energía se encuentra bloqueada y no llega a fluir con normalidad, provocando así malestares físicos, emocionales y mentales, acarreando desequilibrio y desarmonía en todo el cuerpo.
Esos centros energéticos a los que denominamos chakras, se encuentran ubicados en toda la columna vertebral y cada uno de ellos se lo asocia a un sistema en particular, a glándulas, a órganos; por ende, se los relaciona con una emoción y sentimiento determinado o característico. Por ello cuando la energía se encuentra estancada, se perciben alteraciones del sueño, irritabilidad, malestares físicos, problemas digestivos, angustia, depresión entre otros.
La finalidad de esta terapia es lograr armonía y equilibrio a través del desbloqueo energético.
Durante la sesión, se manifestará en el cuerpo una relajación profunda, provocando la liberación de toxinas de los órganos internos, aportando energía vital curativa, logrando una frecuencia vibratoria más generalizada. Cuanta mayor sea la energía que se almacene mayor será su beneficio y su efecto.
El Reiki te aportará bienestar, equilibrio interno, paz mental y salud. Logrando que tu calidad de vida se mantenga estable.
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