Hatha Yoga
Del Conocimiento a la Experiencia en el Yoga.
Mi relación con el Yoga en todos estos largos años, ha sido muy enriquecedora a nivel personal. La experiencia superó mis expectativas, porque esta disciplina me llevó a lugares desconocidos para mí. Porque una cosa eran las bibliografías; pero otra cosa muy distinta era vivirlo internamente. Había cosas que sucedían en mi cuerpo, que no estaba en ningún texto, que nadie te lo explicaba. Porque la experiencia es intransferible, no todos lo viven de la misma forma ni le ocurren las mismas cosas. Se trataba de vivenciarlo en uno mismo. Y es así, realmente es una disciplina de autoconocimiento, en la que te hace estar atento y concentrado en el momento presente. Te enseña a autoevaluarte constantemente a ser ecuánime y a actuar en concordancia con lo que sientes y piensas. A ser autentico contigo mismo, a respetarte y a valorar lo más sagrado que tienes. Te provee de herramientas en las que uno puede usar en el momento que las necesita.
El Yoga no es solo hacer posturas, ni sentarse como un buda meditando, intentando vaciar la mente para lograr paz o la iluminación. El yoga es mucho más rico, te nutre día a día y te enriquece.
El Yoga es apropiado para todos, sin importar las limitaciones que se presenten porque se puede adaptar a todos los cuerpos, empleando diferentes técnicas y modificando lo que sea necesario para que se transforme en una práctica libre, promoviendo la agilidad, la elasticidad; logrando que tus propios avances se vean reflejado en el exterior. Ya que sus beneficios son tan numerosos, además del físico, se activan internamente otros factores a nivel metabólico, celular, cerebral y endocrino.
La finalidad de esta práctica es lograr que vivamos sanos, libres de estrés, que podamos estar felices y que logremos nuestra paz interior sintiéndonos realizados haciendo que la unión verdadera se llegue a concretar conectando nuestro físico con la mente y con el Espíritu.
Todos estos beneficios se obtienen con la constancia y el compromiso constante en la práctica, a través de las asanas, como las posturas; los pranayamas, como las diferentes técnicas de respiración; la meditación, en todos los estilos; kriyas, como limpiezas; mudras, como sellos energéticos; bandas, como cierres energéticos; mantras y rituales como sadhanas.
Como verás la clase de Yoga no empieza ni termina en una esterilla; sino que pasa a ser parte de tu vida diaria. Porque empiezas a conectarte con lo más profundo de ti.
No te pierdas la oportunidad de vivir esta maravillosa experiencia, veras la vida con otros ojos y cobrará un sentido diferente.
Las clases se dictan a través de plataforma de Zoom y son personalizadas.